Miembro fundador del grupo El Paso, Martín Chirino representó como escultor la vanguardia más destacada de la segunda mitad del siglo XX. Su vocación cosmopolita le llevó a realizar numerosos viajes y búsquedas plásticas tempranas en algunos de los centros artísticos mundiales: Estados Unidos, Italia, Londres o París, en donde descubrió en 1952 a Julio González, cuya obra le habría de influenciar profundamente. Es quizás la plasmación de algunos elementos simbólicos de la iconografía indígena canaria y la valoración del oficio de escultor en su dimensión humana y tradicional lo que diferencia a Chirino de otros artistas que han explotado las posibilidades plásticas del hierro y la forja. En este catálogo se realiza una cuidada selección de piezas significativas de sus diferentes etapas.
Lenguas: inglés y castellano
Encuadernación en cartoné, 142 páginas, ilustraciones en color y blanco y negro, 30 x 24 cms